domingo, 15 de enero de 2012

Diario de Alcalá, de Juan Terranova, Pánico el Pánico, 2010, Buenos Aires.
La Virgen del Cerro, de Juan Terranova, DeBolsillo, Editorial Sudamericana, 2007, Buenos Aires.
Pornopunk, de Juan Terranova, Paradoxia libros, 2011, Buenos Aires.



Fuera de las novelas

    Elegí estos textos para comenzar a leer la obra de Juan Terranova. Yo tenía Lejos de Berlín. Y no compraba otras novelas porque estaban un poco caras o porque no las conseguía, pero lo fui haciendo de a poco y ahora tengo cinco en total. Así que me decidí por los textos que no eran novelas, a manera de introducción. Fue una sorpresa, encontré una mirada atenta, mucho compromiso con los temas, algo de humor. Y en los cuentos, una muestra de su ficción.
    Quiero marcar un detalle que me parece está en todos estos textos. Es cierto afán enciclopedista que encontré en los libros, incluso en el de ficción. Apostaría que escribe con la pestaña de Wikipedia siempre abierta. Pensé en Terranova como un peregrino de la web. Un recurso algo borgeano, pero sin el acartonamiento de la Enciclopedia Británica, con el que muchas veces logra hacer de sus textos una recorrida por el mundo y sus cuestiones.


Notas de un invitado
Sobre el Diario de Alcalá
    Es un libro maravillo este pequeño conjunto de anotaciones sobre la estadía de Terranova en España. Fue en 2009. Las noticias sobre el desempleo ya comenzaban a tomar los diarios. Una universidad invita a varios escritores latinoamericanos a una especie de residencia que incluye el momento en que se entrega el premio Cervantes. Aparecen los Reyes, escritores reconocidos, agentes, editores, empleados de entes culturales, profesores, escritores. Excursiones a museos, paseos en metro. Miles de conversaciones, tapas de por medio.
    En ese contexto, un extraño y genuino narrador nos muestra lo profundo de su pensamiento. Hay momentos de extrema lucidez, como cuando cita un comentario de Flaubert sobre Hugo, que había terminado un libro: “El viejo león todavía sabe odiar”. O cuando va con otro escritor a Puerta de Hierro y conversan sobre el Peronismo. También cuando comparten una charla con un diplomático de la Agencia de Cooperación Internacional para el desarrollo, referida a los países centrales, Latinoamérica y la cultura.
    Entretenido, sincero y profundo. Gracioso por momentos. Muy recomendable.


Un cetón moderno
Sobre La Virgen del Cerrro, María Livia y el milagro de la fe.
    “Un cetón es una obra literaria que se compone utilizando versos o fragmentos extraídos de una o más obras anteriores.”, cuenta Terranova en el Epílogo. Y es también, dice, la historia de dos peregrinaciones a Salta, para presenciar “las actividades que se realizan alrededor de la Virgen del Cerro”.
    Para quienes no conocen la historia, se trata básicamente de una mujer salteña que ha presenciado a la Virgen María. Se llama María Livia Galliano de Obeid, y desde 1990 recibe estos mensajes, que debe trasmitir a los peregrinos. También recibió la orden de levantar un santuario en el cerro. Es allí a donde acuden cada sábado los creyentes cristianos, a lo que llaman la Oración de Intercesión, una bendición que, a través de María Livia, los hace caer al suelo, y en muchos casos parece curarlos.
    Las apariciones se hicieron muy conocidas, y un grupo de laicos comenzó a organizar las excursiones y los encuentros en el Cerro. Se ha convertido en el centro de peregrinación de personas de todas las provincias, e incluso de países vecinos.
    Esos son los hechos. El libro es otra cosa. El libro es extraordinario.
    Lo primero que llama la atención es que el autor logra mantener un tono neutro, lejos del prejuicio que, yo creo, cualquiera tendría a la hora de enfrentarse a escribir un texto como éste. Ese tono convence al lector de que se encuentra ante un desafío, el de analizar en profundidad la fe, la vida de los hombres y sus creencias, la capacidad del intelecto.
    Me encontré con un análisis profundo desde adentro de la peregrinación, y más profundo y amplio aún de los hechos que rodean y conforman la Iglesia Católica. Recuerdo ahora la descripción de los viajes, del Convento de las Carmelitas Descalzas, del museo donde están unas momias precolombinas, las ceremonias en el Cerro. Y después el amplio resumen de las apariciones de la Virgen a lo largo del mundo, las cartas y declaraciones de los expertos en apariciones y exorcismos, y también las referidas a cuestiones de doctrina y al caso específico de María Livia.
    Por último, una referencia al origen de los textos, casi todos extraídos de Internet, como el mismo autor lo explica sobre el final del libro. Nada más para decir que ahora el desafío para los autores no es tanto la investigación como sí el oficio y el talento.
    Un libro sorprendente. Terranova nos lleva por el camino de la fe y sus cuestiones, por su historia, por su literatura; aunque los lectores, como en mi caso, no participemos de la religión, y comencemos abriendo el libro con una mueca de escepticismo. Logra, después de horas de entretenida lectura, que lo cerremos pensando que hay cosas nuevas sobre las cuales reflexionar.
    No sucede con muchos textos, sean del género que sean, traten del tema que traten.


Cuatro cuentos
Sobre Pornopunk
    Es un libro pequeño, de la colección de literatura erótica. En una prosa con buen ritmo, ágil pero cargada de datos y referencias a situaciones similares a los temas principales de los cuentos. Y con bastante sexo. Todos los cuentos en primera persona, aunque en el primero y en el último el narrador no es el protagonista.
    Pornopunk, sobre un adicto a Internet y sus experiencias sexuales con una mujer que conoce a través de la web. Hablame de lagartos, sobre la breve relación de una artista y el narrador. Me das miedo, Lucía; sobre el masoquismo en una relación entre dos jóvenes. Y Siempre tendremos Lisboa, sobre un italiano con una novia celópata.
    Y son cuentos nuevos, de hace meses. Se nota. Por los temas, por el contexto. Literatura de hoy, los temas de siempre. Un buen libro para introducirse en la ficción de Terranova.